Blogia
das Mystische 2.1

Das Mystische 2.0

Una modificación estética y otra no tan estética; varían formas y colores, pero todo viene a ser lo mismo. No obstante, lo más importante –ahora: a partir de este mismo sábado, Das Mystische se actualizará (si las circunstancias lo permiten) únicamente el primer sábado de cada mes; es decir, pasará de actualizar semanalmente a hacerlo mensualmente. Nos veremos una vez al mes, pero esto no quiere decir que vayamos a vernos menos. Motivos: los de siempre; tiempo y organización del tiempo para nuevas obligaciones y nuevos proyectos. Le debo un artículo a alguno de los sitios que más quiero, y le debo más de un correo (y alguna justificación puntual) a la mayoría de mis mejores amigos. También trabajo en un libro de papel, como en los viejos tiempos. Espero que la velocidad de Blogia me permita utilizar esta herramienta por mucho años (¿nadie ha notado que conectar con este sitio se vuelve, a determinadas horas del día, completamente imposible?), y que no me vea obligado a emigrar y a cambiar de aires. Los enlaces y demás modificaciones se irán añadiendo poco a poco, entre escaqueo y escaqueo. A la pregunta incorrecta responderé como siempre –de un tiempo a esta parte: con la respuesta incorrecta. Y es que cada vez resulta más difícil comportarse como un artista.

12 comentarios

Enrique -

Ya paso a saludar, Cristina, ya paso. Es que mi vida actual es de una inconmensurabilidad tal que no admite traducibilidad a sistema simbólico alguno. Soy un tipo liado, pero esto ya lo he contado en otras ocasiones y no es cuestión de repetirse.

Besos a todos/todas.

Cristina -

Pues eso habrá que remediarlo. Le regalaré un saquito de nueces...

Inconmensurabilidad me encanta como palabro por inconmensurable.

Y Enrique ni pasa a saludar, y eso que aquí la tiene a una disciplentemente sembrada por la alfombra del nuevo living-room

Otis B. Driftwood -

Y con palabros tan largos como "inconmensurabilidad", por lo menos.

Y no es cierto, no ligo tanto. Es que hago mucho ruido ;-)

Cristina -

¿Ligar? ¿He oído la palabra ligar? ¡Uno de mis vicios favoritos junto con el helado de pistacho!
Bueno, à serio! Te ha quedado relindo el salón te de té, Enrique. Lástima lo de las visitas mensuales, pero bueno, dada la inconmensurabilidad de tus escritos... creo que un mes da para muuuchos comentarios.

carmen -

Perdón. Vengo tarde. Hemos estado de quedada internetera... Acepto una secretaría, pero que sea de poco esfuerzo, que no está una para trotes... sobre todo mentales.
:-)

Otis B. Driftwood -

Pero roscas excepcionales, señorita pini, ya lo dice bien clarito.

pini -

carmen, escuchalo, ahora nos dicen "roscas".
ja.
(roscas recién horneadas)

Enrique -

Otis, tío, tu sabes que eres, con mucho, el mas ligón de la Red. Yo puedo cambiar el papel pintado, pero sigo sin comerme una rosca. Bueno, pini y Carmen son dos excepciones. Aunque me quedo con las excepciones, sin ninguna duda.

Otis B. Driftwood -

Tá quedando mono esto, oiga...

Y la verdad, con este personal de auténtico lujazo, voy a tener que hacerle una OPA hostil o algo, que se está llevando lo más granado de la red :-)

Un abrazo, amigo.

Enrique -

Claro que sí, pini, siempre serás mi Secretaria. Ah! lo de que "debo algún que otro correo" está claro que también va por ti. Carmen, me quedan secretarías libres. ¿Me aceptarías alguna?

carmen -

Tantas cosas por hacer y tan poco tiempo! Tranquilo, que eso nos pasa a todos.

pini -

Enrique pero qué lindo ésto!
(podré seguir siendo secretaria ahora que has cambiado así el decorado?).
un abrazo